Tener un bebé es una experiencia que ofrece momentos maravillosos; sin embargo, también puede añadir tensión en la pareja, lo cual puede repercutir en diferentes problemas. Por ello, la Academia Americana de Médicos de Familia ofrece algunas sugerencias para mantener la relación fuerte y ser unos papás sanos cuando un bebé se une a la familia.
Es importante encontrar tiempo para estar juntos, para ello pueden pedirle ayuda a un amigo o un familiar; si no hay nadie a quien puden solicitarle esto, planeen algo especial en casa.
Asimismo, se debe considerar que se requiere un espacio para que cada uno pueda disfrutar de un tiempo en forma individual. Cuidar a un bebé es un trabajo de 24 horas por lo a veces puede ser complicado encontrarlo, pero es importante hacerlo.
Compartir responsabilidades les ayudará a encontrar momentos “libres” para descansar, pero también fomentará que se aprecien el uno al otro.
Si les es posible, es importante que organicen una cita al menos una vez cada una o dos semanas.
Resulta necesario que tomen en tiempo de hablar sobre lo que están sintiendo tanto si es bueno como si es malo; pues cuando un bebé llega a la familia se sienten muchas emociones que si no se comparten pueden acumularse y dañar la relación. Buscar tiempo para hablar puede ayudar a fortalecer la relación.
Los desacuerdos son normales, sobre todo en época de estrés, pero es fundamental que se manejen estos asuntos con respecto y de una manera justa. En estos casos es importante ser directos y honestos, explicar por qué se está molesto y cuál se piensa podría ser la solución.
Escúchense el uno al otro, presten atención a los sentimientos de la otra persona. Y reconcíliense cuando hayan acabado el argumento.
Vía: HealthDay News, Academia Americana de Médicos de Familia
