Al hacer un microbioma intestinal –es decir, analizar la composición del grupo de bacterias intestinales– es posible ayudar a mejorar la identificación de las personas que están en riesgo de padecer –o que ya tienen– cáncer de colon.
Así lo señaló un estudio reciente, publicado en revista Cancer Prevention Research, en el que los investigadores que para evaluar la composición de los microbiomas intestinales recolectaron muestras de heces de 30 personas sanas, 30 personas con pólipos intestinales precancerosos y 30 personas con cáncer de colon o rectal avanzado.
Según el estudio, cada grupo tenía un microbioma con una composición distinta. Añadir este análisis a la evaluación de la edad y la raza llevó a una mejora de 4.5 veces en la predicción de los pólipos precancerosos; en tanto agregarlo a la evaluación de la edad, la raza y el índice de masa corporal condujo a una mejora de más de cinco veces en la predicción del cáncer colorrectal.
De igual forma, se encontró que para distinguir a las personas con pólipos precancerosos de las que tienen un cáncer invasivo, esta prueba era mejor que las de sangre oculta en las heces.
Y es que a decir del autor del estudio Patrick Schloss de la Universidad de Michigan, si estos resultados son confirmados en grupos más grandes, añadir el análisis del microbioma intestinal a otras pruebas fecales podría proveer una forma mejorada y no invasiva de detectar el cáncer colorrectal.
«Nuestros datos muestran que el análisis del microbioma intestinal tiene el potencial de ser una nueva herramienta para evaluar el cáncer colorrectal de forma no invasiva. No creemos que esto reemplace en algún momento a los otros métodos de evaluación del cáncer colorrectal, sino que más bien lo consideramos como complementario», precisó.
Vía: HealthDay News