Ya sea por descuido a la hora de preparar los alimentos o conservarlos, las infecciones gastrointestinales se pueden presentar en cualquier momento. Sin embargo, cuando se ocasionan en adultos mayores el riesgo de desnutrición o deshidratación por diarrea aumenta.
Por ello, a continuación te presentamos algunos consejos del Instituto Gerontológico para cuidar la higiene en la preparación de alimentos:
Conoce más: Alimentos sólidos en niños pequeños y prevención de la asfixia
- Lavarse las manos con agua y jabón antes de tocar los alimentos, cada vez que se ensucien, después de tocar cada uno de los alimentos crudos, después de manipular la basura y después de ir al lavabo, rascarse, estornudar o sonarse.
- Las heridas de las manos se deben de proteger con un apósito o cinta adhesiva impermeable.
- No se deben llevar joyas.
- No se debe fumar durante la preparación de los alimentos.
- Impedir el contacto de alimentos crudos con los cocinados.
- Mantener los alimentos limpios alejados de los desperdicios.
- Lavar con agua y jabón los cuchillos, la tabla, los recipientes y los utensilios usados, antes de ponerlos en contacto con otro alimento y sobre todo con un producto ya preparado.
- El triturado de la preparación debe hacerse poco antes de su consumo, o bien, de su congelación, para evitar la proliferación bacteriana.
- Enfriar rápidamente los alimentos cocinados para congelar. Se pueden enfriar sumergiendo el recipiente con los alimentos recién cocinados en agua fría y removiendo. Una vez que hayan perdido el calor, se deben repartir los alimentos en recipientes limpios, conteniendo una ración cada uno y meter en el frigorífico. Las raciones que no se vayan a consumir en las 24 horas siguientes se han de conservar, tapadas, en el congelador.
- Evita servir carnes y pescados poco cocinados o medio crudos en alguna de sus partes, hay que asegurar la cocción en el interior.
- Las sobras de los platos deben desecharse.
Vía: Instituto Gerontológico. Nutrición en el anciano