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Hacer ejercicio diariamente puede marcar la diferencia entre tener un corazón saludable o sufrir problemas con tu presión arterial. A decir de especialistas de Mayo Clinic, la actividad física regular fortalece el corazón, permitiéndole bombear más sangre con menos esfuerzo. 

La presión arterial normal es inferior a 120 mm Hg para la cifra superior —sistólica— y menos de 80 mm Hg para la cifra inferior —diastólica—. Ser más activo puede reducir las cifras de presión arterial tanto superiores como inferiores. 

Si bien no está del todo claro cuánto se reduce, estudios muestran reducciones de 4 a 12 mm de Hg diastólica y de 3 a 6 mm de Hg sistólica.

Recomendaciones

  1. Realiza 150 minutos de actividad aeróbica moderada o 75 minutos de actividad aeróbica intensa a la semana —como mínimo—, o una combinación de actividad moderada e intensa. 
  2. Plantéate el objetivo de hacer al menos 30 minutos de actividad aeróbica la mayoría de los días de la semana. Si no estás acostumbrado a hacer ejercicio, trabaja lentamente para lograr este objetivo.
  3. Divide tu entrenamiento en tres sesiones de ejercicio aeróbico de 10 minutos y obtén los mismos beneficios que proporciona una sesión de 30 minutos.
  4. Si pasas varias horas sentado, intenta hacer descansos de 5 a 10 minutos cada hora para estirarte y moverte.
  5. Activa un recordatorio en tu teléfono u ordenador para que no olvides realizar actividad física.

Para reducir el riesgo de lesiones mientras haces ejercicio, comienza de a poco. Recuerda hacer un calentamiento antes de ejercitarte y un enfriamiento una vez que finalices. Te recomendamos aumentar progresivamente la intensidad de los ejercicios.

Conoce más: ¿Cómo incluir la actividad física en tu rutina regular?

Pasos para revisar tu frecuencia cardíaca durante el ejercicio

  • Detente solo un momento.
  • Tómate el pulso durante 15 segundos. 
  • Multiplica el número de latidos por 4 para calcular los latidos por minuto.

Recuerda que la única manera de detectar y controlar la presión arterial alta es llevar un registro de las lecturas de presión arterial. Habla con tu médico y usa un medidor de presión arterial para el hogar. 

 

Fuente: Mayo Clinic