Tus costillas tienen dos funciones principales:
- Protegen a los órganos ubicados en la zona de tu pecho.
- Te ayudan a respirar al mantener un espacio abierto dentro del pecho mientras los músculos que usas para respirar se estiran o contraen. Esto deja suficiente espacio para que tus pulmones se llenen de aire.
Los músculos que se usan en la respiración tiran de las costillas, por lo que respirar puede ser muy doloroso si te fracturas una costilla.
Conoce más: ¿Qué ocurre cuando te fracturas una costilla?
Por lo anterior, es importante ver a un médico tras una lesión en las costillas. Un golpe lo suficientemente fuerte como para fracturar una costilla también podría lesionar los pulmones, el bazo, los vasos sanguíneos u otras partes del cuerpo. Una lesión común cuando tienes una costilla fracturada es un pulmón perforado o colapsado (neumotórax).
El tórax inestable es un problema grave que ocurre cuando se rompen tres o más costillas en más de un lugar. Si tienes un tórax inestable, el área rota no puede mantener su forma cuando respiras. Esto deja menos espacio en el pecho para que se abran los pulmones y entre el aire. También dificulta el buen funcionamiento de los músculos, por lo que es más difícil respirar.
