Cuando la artritis reumatoide (AR) afecta las articulaciones del cuello, particularmente las que se encuentran ubicadas en la parte superior de la columna, pueden ocurrir varias complicaciones.

Las más importantes incluyen las siguientes:

  1. Los huesos y las articulaciones afectados por la artritis reumatoide pueden dislocarse y presionar la médula espinal o las raíces nerviosas.
  2. La presión puede causar entumecimiento, dolor, hormigueo, debilidad, pérdida del control de los intestinos o la vejiga y sensaciones inusuales en la cabeza y el cuello.
  3. La presión también puede obstruir el flujo sanguíneo a través de los vasos sanguíneos de la médula espinal.

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RECUERDA: El dolor de cuello que se experimenta junto con debilidad, entumecimiento u hormigueo en manos, pies, piernas o brazos es el síntoma más común de una posible presión en la médula espinal o en las raíces nerviosas. Aunque la compresión de la médula espinal es bastante rara, puede provocar parálisis si no se trata.

La AR que afecta el cuello también puede causar dolores de cabeza. Estos son cefaleas de tipo secundario que involucran la primera y la segunda vértebra. Hay nervios espinales a ambos lados de estas vértebras, y son dichos nervios los que brindan sensibilidad al cuero cabelludo. Por lo anterior, estos dolores de cabeza pueden ser unilaterales y empeorar con ciertos movimientos del cuello o la cabeza.

Si tienes más dudas sobre la AR de cuello y sus complicaciones, consulta a tu médico.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health / Healthline