La lumbalgia, también conocida como dolor en la espalda baja, es la principal causa de incapacidad laboral de los trabajadores, ya que limita y reduce sus actividades. Así lo señaló el Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS).
Por este motivo, para evitar el dolor lumbar, la institución nacional aconseja a la población combatir el sedentarismo con una caminata diaria de 15 minutos, controlar el peso corporal, evitar estar sentado por mucho tiempo y no cargar objetos de forma incorrecta.
El traumatólogo ortopedista del Hospital de Traumatología y Ortopedia de Lomas Verdes, Jorge Luis Campa Arellano, asegura que la lumbalgia no solamente afecta a hombres y mujeres en edad reproductiva, sino que en cualquier momento de la vida es común padecer este dolor.
No obstante, el especialista agrega que en ciertos casos se requiere una intervención quirúrgica debido a la probabilidad de que este malestar sea causado por un tumor o por modificaciones degenerativas, que aparecen en los adultos mayores.
La lumbalgia en la tercera edad se genera por el angostamiento del canal medular en la zona baja de la columna. La estrechez provoca una mayor presión sobre la médula espinal, influyendo en las extremidades inferiores. Esto también reduce la fuerza y sensibilidad de las piernas.
Prevención del dolor lumbar
Para prevenir el dolor lumbar, es fundamental evitar las posturas incorrectas. Al sentarse, hay que mantener la espalda en una posición normal, levemente arqueada. La parte lumbar debe estar apoyada en el respaldo, manteniendo la cabeza y los hombros erguidos.
La superficie de trabajo debe estar a la altura adecuada, para no tener que inclinarse hacia adelante. De ser posible, se aconseja ponerse de pie y estirarse cada una hora. También puedes poner tus manos en la parte baja de la espalda y posteriormente arquear de manera suave hacia atrás.
Asimismo, debemos prescindir del consumo de cigarrillos. El humo y la nicotina causan que la columna vertebral se desgaste más rápido que lo común.
También es recomendable realizar actividades físicas como la natación, que contribuyen a conseguir un equilibrio muscular.
Un ejercicio que puede hacerse en casa y que no requiere ningún implemento adicional es permanecer de pie y levantar una pierna en 90 grados. A continuación, debes doblar el tronco hacia la rodilla. Esto se hace por un periodo de 30 a 60 segundos, repitiendo la misma acción con la otra extremidad.
Otra postura recomendable es, cuando te acuestes, alzar la pierna con la rodilla extendida también en 90 grados. Luego, debes alternar con la otra.
