Los establecimientos con trampolines, así como las instalaciones recreativas con toldos elásticos de pared a pared, se han vuelto cada vez más populares en los últimos años. Se calcula que en 2011, sólo existían alrededor de 35 parques de este tipo, según la Asociación Internacional de Parques de Trampolín. Para el año 2014, el número se elevó a 280.
Aunque estos lugares pueden ser divertidos, un nuevo estudio publicado en la revista Pediatrics dio a conocer que dichos espacios están incrementando —en gran medida— el número de visitas de los niños a las salas de emergencia de los hospitales.
Estos parques suelen tener ciertas características de seguridad, tales como paredes acolchadas y empleados que supervisan la escena. Sin embargo, esa impresión externa de seguridad puede ser un «arma de doble filo», declaró el doctor Robert Glatter, médico de urgencias en el Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.
Tener paredes acolchadas y supervisión por parte de un adulto ayuda, mencionó Glatter. «Pero», añadió, «pueden dar a los padres una falsa sensación de seguridad».
Los niños todavía pueden lastimarse si colisionan con otros menores, se golpean en el marco del trampolín, o caen de manera incorrecta, enfatizó el experto; y sugirió a los padres que, de asistir a estos lugares, sus hijos usen el mismo equipo de protección que utilizan cuando andan en bicicleta o en patineta.
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Para concretar el trabajo, los investigadores hicieron una revisión de los informes del Sistema Nacional de Vigilancia Electrónica de Lesiones de Estados Unidos, descubriendo que las visitas a las salas de emergencia relacionadas con este tipo de diversión aumentaron de 581, en el 2010, a 6.932 en el 2014. La edad promedio de los pacientes fueron jóvenes de 13 años, en donde los más propensos fueron los varones.
Esguinces y fracturas fueron las emergencias más comunes, pero las lesiones graves, incluidas fracturas abiertas, y las de médula espinal, requirieron hospitalización. Los autores también afirmaron que durante el mismo periodo de tiempo, las lesiones relacionadas con los trampolines usados en los hogares no se incrementaron.
La Academia Americana de Pediatría no recomienda que los niños usen los trampolines como actividad recreativa.
No olvides que en estos parques debes supervisar a tus niños todo el tiempo, prohibirles hacer giros u otra clase de «acrobacias», y tener cuidado si se llena el área del trampolín.
Vía: HealthDay News
