Aunque nadar es una actividad física que brinda muchos beneficios para la salud, las piscinas y otros lugares de aguas recreativas también pueden ser fuentes de microbios y sitios donde pueden ocurrir lesiones.

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Las enfermedades propagadas a través del agua en sitios de recreación acuática son generadas por microbios que se transmiten al tragar líquido contaminado, respirar partículas de la misma o de aerosoles. También pueden contagiarse mediante bañeras para hidromasaje, lagos, ríos o el mar.

Asimismo, una nueva investigación detectó que las personas habitualmente introducen excrementos al agua. Esto pasa cuando no utilizan jabón en la ducha antes de nadar o si tienen problemas estomacales dentro de la piscina.

Contrario a la creencia, el cloro y otros desinfectantes agregados al agua no eliminan a los microbios de forma inmediata. Cuando estos organismos ingresan a la piscina, el químico utilizado podría demorar desde minutos a días en hacerlos desaparecer. De esta manera, antes de que esto ocurra, los microbios pueden ocasionar infecciones gastrointestinales, respiratorias y neurológicas, así como también en la piel, oídos y ojos.

Este tipo de patología más habitual es la diarrea, que puede presentarse solamente si tragas una pequeña porción de agua que posea estos microbios.

Por otra parte, al igual que estas afecciones, también pueden ocasionarse lesiones dentro del agua o en sus alrededores, como caídas, resbalones y accidentes mucho más severos, como ahogamientos.

Recomendaciones para evitar los microbios

En los centros de aguas recreativas todos compartimos en mismo espacio de diversión, por lo que cada nadador debe contribuir para mantener una correcta higiene y salud. A continuación, te enseñamos algunas medidas de prevención:

– Mantén el agua sin excrementos ni orina.

– No ingreses a la piscina cuando tengas problemas estomacales.

– Antes de nadar, dúchate utilizando jabón.

– Enjuágate en las duchas antes de volver a ingresar a la piscina.

– Acude al baño cada 60 minutos.

– No tragues el agua de la piscina.

– Lávate las manos luego de ir al baño o de cambiar pañales.

Los padres de niños pequeños deben seguir algunas recomendaciones adicionales, como llevar al baño a sus hijos cada 60 minutos o revisar sus pañales cada 30 o 60 minutos. Los pañales deben ser cambiados en el baño o en alguna zona destinada para esto.

Consejos para evitar otros accidentes

El ahogamiento es la primera causa de muerte por lesiones en menores de 1 a 4 años de edad. Diariamente, 10 personas mueren ahogadas y 2 de ellas corresponden a niños menores de 15 años. Si bien más de la mitad de las víctimas de estos accidentes logran sobrevivir a través de una atención oportuna en salas de emergencia, frecuentemente quedan con daño cerebral que puede derivar en problemas de memoria, aprendizaje o pérdida permanente de funcionamiento básico.

Para evita estas lamentables situaciones, tenemos estas recomendaciones:

-Toda persona que ingrese al agua debe saber nadar.

-Quienes cuidan a los niños deben estar capacitados para realizar reanimación cardiopulmonar.

-Las personas que navegan y quienes no son buenos nadadores, deben utilizar un chaleco salvavidas.

-Si tienes piscina en el patio de tu casa, debe estar rodeada por una cerca para evitar caídas en su interior.