Las alucinaciones pueden ser signo de una enfermedad de salud mental, pero no siempre significan que una persona no se encuentra bien. De hecho, las alucinaciones son relativamente comunes.
Cabe señalar que las alucinaciones pueden ocurrir en cualquier momento que se haya presentado un cambio en la actividad cerebral. Por ejemplo, algunas personas son más vulnerables a las alucinaciones cuando se quedan dormidas o están parcialmente despiertas.
Un estudio del año 2019 concretado en ratones que tomaron una sustancia alucinógena, descubrió que los animales tenían menos actividad en las regiones del cerebro que los investigadores asociaron con el manejo de la información visual entrante.
Dicha observación sugiere que una alucinación podría ser la forma en la que el cerebro compensa una caída en la información sensorial.
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Existen muchos tipos diferentes de alucinaciones, los cuales incluyen:
- Alucinaciones auditivas: ocurren cuando alguien escucha algo que no está ahí, como una voz o una radio.
- Alucinaciones visuales: provocan que alguien vea algo que no es real, como una persona o un animal.
- Alucinaciones olfativas: pueden ocurrir cuando una persona huele algo que no está realmente ahí.
- Alucinaciones gustativas: hacen que alguien pruebe algo que no comió.
- Alucinaciones táctiles: ocurren cuando una persona siente que algo o alguien la tocó.
- Alucinaciones somáticas: estas alucinaciones pueden afectar a todo el cuerpo, provocando sensaciones irreales como la de insectos arrastrándose por la piel.
Fuente: Medical News Today
