La otitis externa puede afectar tanto a niños como a adultos. Se le conoce popularmente como oído de nadador porque el agua que queda en el oído después de nadar crea el ambiente ideal para que crezcan bacterias u hongos. La infección también puede presentarse cuando un objeto extraño, como un cotonete de algodón o un tapón para los oídos, introduce bacterias en el canal auditivo.
Debido a que la humedad en el canal auditivo estimula el crecimiento de bacterias y hongos, usualmente el sistema inmunológico tarda un tiempo en controlar la infección.
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Sin tratamiento, una infección del oído externo puede tardar varias semanas en lugar de días en desaparecer. El problema con esto es que, si no se trata, la inflamación persistente puede causar un estrechamiento permanente del canal auditivo y pérdida de audición.
El tratamiento del oído de nadador consiste principalmente en gotas para los oídos. Dependiendo de la gravedad y etiología puedes requerir:
- Gotas que acidifican el canal auditivo (lo que lo vuelve hostiles a las bacterias y los hongos)
- Gotas que secan el canal (eliminando la humedad que promueve el crecimiento de bacterias y hongos)
- Gotas con antibióticos o antifúngicos.
Las instrucciones varían, así que acude con tu médico para asegurarte de que te recete el tratamiento correcto.
Fuente: Very Well Health
