El tinnitus es la percepción de un silbido o zumbido en uno o ambos oídos que puede ser constante o ir y venir.
Según la Clínica Cleveland, el tinnitus es un síntoma más del 75% de todos los trastornos que afectan a nuestros oídos. La mayoría de las personas que sufren pérdida auditiva también lo padecen.
A continuación te mencionamos condiciones de salud en las que las personas desarrollan pérdida auditiva que causa tinnitus:
- Envejecimiento. La pérdida de audición relacionada con la edad (presbiacusia) afecta a 1 de cada 3 adultos mayores de 65 años.
- Exposición a ruidos fuertes o explosiones. Esto puede suceder con el tiempo o por un solo incidente. La exposición a música con volumen muy alto o trabajar en un ambiente muy ruidoso puede ocasionar pérdida de audición y tinnitus.
- Medicamentos ototóxicos. Existe una amplia gama de medicamentos que pueden dañar los oídos. Si te preocupa el tinnitus, pregúntale a tu médico sobre los efectos secundarios y las alternativas a estos medicamentos.
- Enfermedad de Meniere. Es un trastorno crónico del oído que afecta el equilibrio y la audición.
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Cabe mencionar que puedes desarrollar tinnitus sin que haya pérdida auditiva. Los médicos relacionan el tinnitus con alrededor de 200 condiciones de salud distintas. A continuación te mencionamos algunos ejemplos:
- Trastorno de la articulación temporomandibular (ATM). El tinnitus es un síntoma común de la ATM, que es una afección causada por la inflamación o irritación de los músculos y las articulaciones.
- Objetos extraños alojados en tu oído. En ocasiones, objetos extraños como plumas o lápices que se usaron para limpiar los oídos terminan rompiendo los tímpanos.
- Cerumen excesivo. El cerumen puede tapar tus oídos y afectar tu audición.
- Alergias. La congestión por alergias puede afectar la trompa de Eustaquio, un tubo que conecta tu oído medio y la parte posterior de tu nariz. Cuando la congestión bloquea la trompa de Eustaquio, esta puede evitar que el sonido llegue a tu oído.
- Schwanoma vestibular (neuroma acústico). Es un tumor benigno (no canceroso) que afecta los nervios que se conectan al cerebro y controlan el equilibrio y la audición. Las personas que tienen neurofibromatosis tipo 2 suelen desarrollar schwannomas vestibulares.
- Otoesclerosis. Este es un crecimiento anormal de hueso en el oído medio.
Fuente: Cleveland Clinic
