Muchas personas requieren tomar medicación de forma constante, ya sea porque padecen una enfermedad crónica o porque sus médicos la indicaron para prevenir un problema de salud importante.
Independientemente de ello, existe el riesgo de cometer errores, tanto en la prescripción, como en la dispensación y administración de los medicamentos. Afortunadamente, la mayoría de estos errores se pueden prevenir. Especialistas de Mayo Clinic recomiendan lo siguiente:
- Participa activamente en tu atención médica. Conoce los medicamentos que tomas, incluidos los posibles efectos secundarios. Nunca dudes en hacer preguntas o compartir inquietudes con tu médico o farmacéutico.
- No te castigues si cometes un error. Los errores de medicación pueden sucederle a cualquier persona en cualquier lugar, incluido tu hogar, el consultorio o la farmacia.
- Mantén una buena comunicación con tus médicos. De la misma forma, procura que exista una buena comunicación entre ellos.
- Usa el conocimiento como tu mejor defensa. Si no has entendido algo que dijo tu médico, pide que te lo explique.
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Errores que debes evitar
- Confundir gotas para los oídos con gotas para los ojos.
- Masticar cosas que no son masticables.
- Cortar los comprimidos, a menos que tu médico te haya dicho que es seguro hacerlo.
- Usar la cuchara equivocada. Para tener una dosis exacta, utiliza una jeringa oral o el recipiente de dosificación que vino con el medicamento.
Recomendaciones
- Mantén una lista actualizada de todos los medicamentos que tomas, incluidos los medicamentos de venta libre y los suplementos.
- Conserva los medicamentos en sus envases rotulados originales.
- Mantén tus medicamentos organizados en un pastillero o un dispensador automático de medicamentos.
- De ser posible, acude a la misma farmacia para comprar todos tus medicamentos con receta médica.
- No compartas tus medicamentos recetados a otra persona ni tomes medicamentos recetados para otra persona.
Si a pesar de los esfuerzos que haces tienes problemas con un medicamento, habla con un profesional de la salud.
Fuente: Mayo Clinic