Los desodorantes y antitranspirantes generalmente se consideran productos seguros. No obstante, en ocasiones pueden ocurrir reacciones alérgicas. Las alergias que resultan de algo con lo que la piel entra en contacto se conocen como dermatitis por contacto.
Los expertos clasifican los desodorantes como agentes cosméticos. Estos reducen el crecimiento bacteriano e incluyen fragancias para enmascarar los olores. Las agencias sanitarias clasifican los antitranspirantes como medicamentos; suelen contener aluminio. Algunos productos se consideran tanto cosméticos como medicamentos.
La dermatitis por contacto suele limitarse al área que tocó la sustancia causante. En el caso de los desodorantes y antitranspirantes, dicha zona suele ser la axila.
Las alergias a los desodorantes y antitranspirantes pueden provocar los siguientes síntomas:
- Picazón
- Bultos o protuberancias
- Enrojecimiento
- Ampollas
- Descamación
- Peladura de piel
- Supuración
El tiempo que tardan en aparecer los síntomas puede variar, y pueden ocurrir a los pocos minutos de aplicar el producto o incluso horas después.
En ocasiones, los efectos desaparecen rápidamente, durando a lo mucho una hora. Pero pueden durar días y es posible que no desaparezcan hasta que dejes de utilizar el producto por completo.
Fuente: Very Well Health
