El uso excesivo e incorrecto de los antibióticos es un factor que propicia la resistencia a dichos medicamentos. El público en general, los médicos y los hospitales deben garantizar el uso adecuado de los antibióticos para así minimizar la resistencia a los mismos, así lo indica la Clínica Mayo, en Estado Unidos.
Por ello, la clínica señala que una adecuada administración de antibióticos brinda las siguientes ventajas:
- Se preserva su eficacia
- Se extiende su vida útil
- Protege a las personas de infecciones resistentes a los antibióticos
- Evita los efectos secundarios del uso inadecuado de estas medicinas
RECUERDA: Muchos hospitales y asociaciones médicas han implementado nuevas pautas de diagnóstico y tratamiento para asegurar que los tratamientos con antibióticos sean eficaces contra las infecciones bacterianas y se reduzca el uso inadecuado de estos medicamentos.
Conoce más: 3 medicamentos que ayudan a aliviar la bronquitis
Recomendaciones
Tú también debes intervenir en el uso adecuado de los antibióticos. Para lograrlo, puedes ayudar a reducir la resistencia a estos tomando las siguientes medidas:
- No presiones a tu médico para que te recete antibióticos. Pídele consejos para tratar los síntomas.
- Practica buenos hábitos de higiene para evitar infecciones bacterianas que requieren tratamiento con antibióticos.
- Asegúrate de que tú y tus hijos reciban las vacunas recomendadas. Algunas protegen contra las infecciones bacterianas, como la vacuna contra la difteria y la tos ferina.
- Reduce el riesgo de contraer infecciones bacterianas transmitidas por los alimentos. No bebas leche cruda, lávate las manos y cocina los alimentos a una temperatura interna segura.
- Usa los antibióticos solo como te los recetó el médico. Toma la dosis diaria recetada y completa todo el tratamiento.
- Nunca tomes lo que quede de un antibiótico para tratar una enfermedad posterior. Quizás no sea el antibiótico correcto y, en consecuencia, no completarás el tratamiento.
- Nunca tomes antibióticos que fueron recetados para otra persona.
Vía: Mayo Clinic
