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Se sabe que la actividad física ayuda a prevenir la demencia y las enfermedades mentales, pero es posible que el tipo de actividad física que hagas marque una diferencia, pues de acuerdo con un nuevo estudio publicado en la revista Scandinavian Journal of Medicine and Science in Sports, el trabajo físico duro no solo NO reduce el riesgo de demencia, sino que aumenta el riesgo de desarrollar la enfermedad.

Los investigadores hallaron que las personas que realizan un trabajo físico duro tienen un riesgo 55 por ciento más alto de desarrollar demencia, en comparación con quienes realizan un trabajo sedentario.

«La guía de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para prevenir la demencia y la enfermedad en general menciona la actividad física como un factor importante. Pero nuestro estudio sugiere que debe ser una ‘buena’ forma de actividad física, y el trabajo físico duro no lo es», señaló la investigadora Kirsten Nabe-Nielsen, profesora asociada del Departamento de Salud Pública de la Universidad de Copenhague (Dinamarca). «Por lo tanto, las guías de las autoridades sanitarias deben diferenciar entre la actividad física durante el tiempo libre y la actividad física en el trabajo, ya que hay razones para creer que las dos formas de actividad física tienen efectos opuestos».

Otro estudio mostró recientemente que un estilo de vida saludable puede reducir a la mitad el riesgo de desarrollar demencia.

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Investigadores de la Universidad de Copenhague y del Centro Nacional de Investigación para el Entorno Laboral utilizaron datos del Copenhagen Male Study, en el que 4,721 hombres daneses informaron durante la década de 1970 sobre el tipo de trabajo que realizaban para 14 empresas con sede en Copenhague. A lo largo de los años, los investigadores recopilaron datos de salud de los encuestados.

Ahora, los expertos están recopilando más datos con la intención de identificar formas más saludables de realizar un trabajo físico duro, de manera que tenga el mismo efecto que hacer ejercicio.

«Muchos lugares de trabajo ya han tomado medidas para mejorar la salud de su personal. El problema es que es la parte más educada e ingeniosa de la población la que usa estas iniciativas. Aquellos con una educación más limitada a menudo luchan contra el sobrepeso, el dolor y una mala condición física, pese a que dan más pasos durante el día y usan su cuerpo en mayor medida como una herramienta», detalló Andreas Holtermann, del Centro Nacional de Investigación para el Ambiente de Trabajo y coautor del estudio.

«Para los trabajadores no es suficiente, por ejemplo, evitar los levantamientos pesados ​​si desean permanecer en la profesión hasta los 70 años. Las personas con una educación más corta que realizan trabajos manuales también deben tomar medidas preventivas fortaleciendo la capacidad de su cuerpo a través de ejercicio y entrenamiento de fuerza», añadió Holtermann.

 

Vía: Health Day News