Un médico de atención primaria o un especialista neurológico puede diagnosticar un trastorno cerebral. Es probable que ambos realicen un examen neurológico para verificar tu visión, audición y equilibrio. También pueden obtener imágenes de tu cerebro que les ayudarán a realizar un diagnóstico. Las herramientas de diagnóstico por imagen más comunes son la tomografía computarizada, la resonancia magnética y la tomografía por emisión de positrones (PET).

Es posible que tu médico también necesite estudiar el líquido de tu cerebro y de la médula espinal. Esto les ayuda a encontrar sangrado en el cerebro, infección y otras anomalías.

Los trastornos de salud mental generalmente se diagnostican con base en una evaluación de tus síntomas e historial.

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¿Cuál es el pronóstico a largo plazo?

El pronóstico para las personas con trastornos cerebrales depende del tipo y la gravedad del trastorno cerebral. Algunas condiciones se tratan fácilmente con medicamentos y terapia. Por ejemplo, millones de personas con trastornos de salud mental viven una vida plena y de calidad.

Otros trastornos, como las enfermedades neurodegenerativas y algunas lesiones cerebrales traumáticas, no tienen cura. Las personas con estas condiciones generalmente suelen enfrentar cambios permanentes en su comportamiento, habilidades mentales o coordinación. En estos casos, el tratamiento se centra en ayudarlas a controlar la enfermedad y en que mantengan la mayor independencia posible.

 

Fuente: Healthline