Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son medicamentos que ayudan a combatir el dolor. Los ejemplos más comunes y populares de estos incluyen a la aspirina, el ibuprofeno y el naproxeno.

Los AINE se comercializan en presentaciones de venta libre y con receta. Dichos medicamentos se pueden tomar algunas veces o todos los días. Cuando se toman con regularidad, se acumulan en la sangre para combatir la inflamación (hinchazón) y aliviar el dolor en general.

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Cabe señalar que siempre debes tomar AINE después de comer o junto con leche si no has ingerido alimento, ya que los efectos secundarios más comunes están relacionados con el estómago. Otros efectos secundarios de utilizar tales medicinas suelen incluir:

  1. Aumento de hematomas (moretones).
  2. Riesgo de sangrado en el estómago.
  3. Daño renal (cuando se toma por largos períodos de tiempo).
  4. Presión sanguínea elevada.
  5. Interferencia con medicamentos para controlar la presión arterial.

RECUERDA: Si tomas otros analgésicos, no tomes AINE sin antes hablar con tu médico.

 

Fuente: American Academy of Family Physicians