Cuando entras en contacto directo con la electricidad, esta puede atravesar tu cuerpo y causar lesiones, así lo advierte la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Las lesiones por electricidad pueden ser externas o internas, y una persona puede experimentar uno o ambos tipos. Las lesiones externas incluyen quemaduras en la piel. Las lesiones internas abarcan daño a tus órganos, huesos, músculos y nervios. También podrías tener ritmos cardíacos anormales y un paro cardíaco repentino.
La gravedad de tus lesiones dependerá de qué tan fuerte haya sido la corriente eléctrica, qué tipo de corriente era, cómo se movía a través de tu cuerpo y cuánto tiempo estuviste expuesto(a). Otros factores incluyen tu estado de salud y qué tan rápido recibes algún tratamiento.
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Las principales causas de lesiones por electricidad incluyen:
- La caída de rayos.
- Aparatos eléctricos defectuosos.
- Exposiciones relacionadas con el trabajo.
- Contacto con cableado doméstico o líneas eléctricas.
- Accidentes en niños pequeños, cuando muerden o chupan cables eléctricos o clavan objetos en los enchufes.
RECUERDA: Si sufres una lesión eléctrica, debes acudir con un médico a la brevedad. Esto porque existe la posibilidad de que tengas daño interno y no te hayas dado cuenta.
