De acuerdo con el Departamento de Servicios Ambientales de New Hampshire, en Estados Unidos, los olores son sustancias químicas en el aire que pueden ser percibidas o detectadas por nuestra nariz (sistema olfativo). Las manzanas le deben su «esencia» a los químicos que crean el olor de esta fruta. Los olores, también llamados aromas, pueden ser agradables y desagradables. Los humanos pueden distinguir entre más de 5,000 olores diferentes.

Respiramos de 10,000 a 20,000 litros de aire al día, principalmente a través de la nariz. El sistema olfativo entra en contacto con una variedad y concentración de olores diferentes a diario. Los olores pueden alertar a las personas sobre algo que quizás es dañino, pero en general, puedes oler muchas sustancias químicas antes de que alcancen niveles que sean perjudiciales para tu salud, señala el departamento.

Por ejemplo, podemos oler el sulfuro de hidrógeno (H2S), cuya solución acuosa es el ácido sulfhídrico. Este huele a huevo podrido a niveles muy bajos, lo que lo hace inofensivo o no tóxico para la salud.

No obstante, sí hay olores que pueden causar problemas de salud. Los olores que producen ciertos grupos de químicos pueden ser potencialmente dañinos y afectar la salud general. Algunos de estos productos químicos nocivos están regulados por agencias locales mediante un programa de control de tóxicos del aire y protección ambiental (infórmate sobre ello para conocer estos productos tóxicos).

Cabe subrayar que el hecho de que algo huela mal no significa que sea dañino. Existen químicos mortales que pueden tener un olor suave o dulce, como el benceno, o no tener ningún olor, como el monóxido de carbono.

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Pongamos también el ejemplo del sulfuro de hidrógeno (H2S), que huele a huevos podridos. El nivel en el que puedes comenzar a oler H2S es a partir de 1.0 microgramo por metro cúbico. La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) ha determinado que no hay riesgo para la salud asociado con la exposición al H2S a esta concentración. El nivel de H2S que se considera perjudicial para la salud pública y el medio ambiente es de 50 microgramos por metro cúbico.

Así, los efectos de la exposición a olores químicos pueden ser una amenaza inmediata para la salud, una amenaza a largo plazo o podrían no representar ningún peligro.

Enfermarse por olores químicos dependerá del agente al que te hayas expuesto, cuánto tiempo lo estuviste, con qué frecuencia, y de tu sensibilidad individual al olor.

La influencia de los olores en la salud y en la comodidad de las personas es difícil de evaluar. La sensibilidad y la respuesta a los olores difieren de individuo a individuo. Para quienes son más
sensibles a los olores, el simple hecho de percibir una pequeña cantidad de un mal olor puede ocasionarle dolores de cabeza y náuseas. Las poblaciones más sensibles incluyen a los niños pequeños, mujeres embarazadas, ancianos y personas con problemas crónicos de salud (asma, enfisema y otras enfermedades respiratorias como EPOC [enfermedad pulmonar obstructiva crónica], así como depresión, hipersensibilidad química o enfermedad inducida por el estrés).

Por lo anterior, si tienes más dudas sobre cómo los olores afectan la salud o si algún olor en particular está causando problemas en tu cuerpo, acude con un médico.

 

Vía: New Hampshire Department of Environmental Service