i-efectos-cafeina-niños-adolescentesDe acuerdo con Jennifer Temple, profesora asociada de la Universidad de Búfalo, en Nueva York, incluso las dosis bajas de cafeína pueden tener efecto en la frecuencia cardíaca y la presión arterial en los niños.

Y es que este estimulante, presente en el café, las bebidas energéticas y los refrescos, podría ser procesado por los niños de manera distinta después de la pubertad; así lo sugiere un estudio reciente, encabezado por Temple.

Para llegar a estos resultados, alrededor de 100 preadolescentes y adolescentes –la mitad tenía entre 8 y 9 años y los demás entre 15 y 17– consumieron la cantidad de cafeína equivalente a la que se encuentra en una lata de refresco o una taza de café, respectivamente.

Así, se observó que el estimulante reducía la frecuencia cardíaca de quienes habían pasado la pubertad de 3 a 8 latidos por minuto y los hombres resultaron más afectados que las mujeres. De igual manera, una vez pasada la pubertad, se aumentó la presión arterial sistólica de los varones en mayor medida que la de las chicas, aunque este efecto fue leve.

«Esto sugiere que los chicos podrían ser más sensibles a los efectos de la cafeína que las chicas», señaló Temple.

Sin embargo, la investigadora agregó que «los individuos no serían capaces de notar ninguna diferencia y ciertamente no se puede observar a un chico y a una chica y esperar encontrar diferencias entre ellos».

En cambio, los efectos de la cafeína fueron relativamente similares en los sujetos antes de la pubertad, lo que sugiere que los cambios hormonales que surgen en esta etapa podrían tener un papel en la manera en que estos jóvenes procesan la cafeína.

En todo caso, es necesaria una mayor investigación para determinar si las diferencias de género están determinadas por la fisiología o por diferencias en el consumo de esta sustancia.

«Aunque nuestros datos no sugieren que este nivel de cafeína sea particularmente dañino, probablemente no haya beneficio en el hecho de dar cafeína a los niños, y deberían tomarse en cuenta los posibles efectos negativos sobre el sueño al decidir qué bebidas se dan a los niños», señaló.

En este sentido, diferentes especialistas, como la American Academy of Pediatrics desaconsejan el consumo de la cafeína en los niños y los adolescentes por las preocupaciones que existen sobre los problemas cardiovasculares.

Vía: HealthDay News