Mantener una dieta saludable es esencial para prevenir y controlar diversas enfermedades, como la hipertensión arterial. De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, hacer cambios positivos en la alimentación ayuda a perder peso, al tiempo que disminuye la probabilidad de sufrir una enfermedad cardíaca y un infarto cerebral.
El primer paso para mejorar la dieta diaria es reducir los niveles de sodio de los alimentos. Una dieta baja en sal ayuda a controlar la hipertensión arterial. De hecho, se ha comprobado que la dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension) tiene efectos sobre la presión arterial y, algunas veces, estos se ven reflejados al cabo de unas cuantas semanas.
Esta dieta es rica en nutrientes importantes y baja en sodio. También incluye alimentos ricos en potasio, calcio y magnesio. Si quieres conocerla mejor, da clic aquí.
Conoce más: Adultos mayores frágiles con hipertensión, ¿por qué deben tomar sus medicinas?
Recomendaciones
- Lee las etiquetas de los alimentos y presta atención especial al nivel de grasa saturada.
- Evita o reduce los alimentos ricos en grasa saturada —más de 20% de la grasa total se considera alto—.
- Elige alimentos con proteína magra, como soja, pescado, pollo sin piel, carne y productos lácteos descremados.
- Busca las palabras «hidrogenados» o «parcialmente hidrogenados» en las etiquetas de los alimentos y evítalos.
- Limita la cantidad de alimentos procesados y fritos que consumes.
- Reduce la cantidad de productos preparados comercialmente.
- Presta atención a cómo se preparan los alimentos. Las maneras saludables de cocinar son asar a la parrilla, a las brasas, hervir y hornear.
Si tienes dudas respecto a tu alimentación, consulta a tu médico. ¡Cuida tu corazón!
Fuente: MedlinePlus/ Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
