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¿Deseas que tus comidas sean más crujientes pero quieres evitar las molestas calorías? Entonces no pases por alto el apio, que es un alimento bajo en calorías.

Con solo 6 calorías por taza, el apio es una verdura refrescante perfecta para el clima cálido, la cual te ayuda a mantenerte hidratado(a) gracias a su alto contenido de agua. Pero no hay razón para limitarte a las mismas viejas opciones. El apio es una gran adición a una comida veraniega que te va a encantar, el rollo de langosta.

Rollo de langosta crujiente

  • 1 taza de apio bien picado
  • 230 gramos de carne de langosta, cortada en trozos
  • 1/2 manzana, picada
  • 1 taza de col rizada, en rodajas finas
  • 2 cucharadas de mayonesa
  • 2 cucharadas de yogur griego natural
  • 1/2 cucharadita de sal de apio
  • 4 panes para hot dog de trigo integral

Coloca el apio, la langosta, la manzana, la col rizada, la mayonesa, el yogur y la sal de apio en un tazón grande y mezcla bien. Tuesta los panes para hot dog y llénalos con la misma cantidad de ensalada de langosta y sirve de inmediato.

Rinde: 2 porciones.

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La raíz de apio también es un gran aliciente para el paladar, pero con un sabor a apio menos pronunciado. Cómprala en la sección de vegetales del súper donde se encuentran otras verduras con raíz. No te desanimes por su aspecto áspero y nudoso. Se puede preparar de muchas formas deliciosas.

La raíz de apio es una excelente alternativa al repollo para una ensalada sin cocinar y es un intercambio ideal para los vegetales con alto contenido de almidón, como las papas, pues contiene menos carbohidratos y calorías (solo 65 calorías por taza con 14 gramos de carbohidratos y casi 3 gramos de fibra). Es deliciosa y puede convertirse en chips crujientes que son mucho más saludables que las papas fritas típicas.

Chips de raíz de apio

  • 1 raíz de apio de 1 kilo
  • 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
  • 1 cucharadita de paprika
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra, recién molida
  • 1/2 cucharadita de sal de ajo
  • 1/2 cucharadita de cebolla en polvo

Precalienta el horno a 400 grados.

Corta la parte superior e inferior de la raíz de apio. Usa un cuchillo de pelar para cortar las manchas de la raíz que son demasiado gruesas para que un pelador de verduras las corte. Luego, usa un pelador para quitar la piel restante. Si es necesario, recorta la raíz de apio para que quede plana en una mandolina rebanadora. Sostén la raíz en su lugar y córtala en discos delgados.

Coloca los discos en un tazón grande y mezcla con el aceite de oliva hasta que estén bien cubiertos. Agrega la paprika, la pimienta negra, la sal de ajo y el polvo de cebolla y mezcla nuevamente.

Organiza las rebanadas en una sola capa en las bandejas para hornear. Hornea durante 15 a 20 minutos, hasta que queden doradas. Sírvelas de inmediato o enfríalas completamente y guárdalas en un recipiente hermético hasta por tres días.

Rinde: 4 porciones

 

Vía: Health Day News