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Algunas personas padecen problemas de salud que dificultan la digestión de muchos alimentos. Pero, ¿sabías que el pan tostado es más fácil de digerir que el pan normal? Esto porque el proceso de tostado descompone algunos de los carbohidratos.

El pan tostado puede ayudar a disminuir las náuseas y reducir la acidez estomacal; sin embargo, no todos los panes tostados son iguales.

Ya sea que lo compres tostado o tú lo tuestes, el pan integral es más saludable que el pan blanco, pero es rico en fibra y para algunas personas puede ser más difícil comerlo.

Si una persona tiene problemas para digerir el pan tostado integral, el primer paso es probarlo sin añadirle nada, como mantequilla (que es común que muchas personas se la añadan al pan después de tostarlo). Para obtener un sabor adicional, elige mermeladas de frutas en lugar de cremas para untar, como la de mantequilla, cacahuate o nuez.

El pan blanco enriquecido es una opción si alguien no puede tolerar los granos integrales. Dependiendo del tipo, dos rebanadas de pan blanco enriquecido te pueden aportar:

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  • 140 calorías
  • 29 gramos (g) de carbohidratos
  • 4 g de proteína
  • 1 g de fibra
  • 60.2 miligramos (mg) de calcio
  • 1.44 mg de hierro
  • 60.2 microgramos (mcg) de ácido fólico

Las rebanadas finas de pan blanco tostado sin untar pueden ser la mejor opción para algunas personas.

Por otra parte, aquellas con intolerancia al trigo o al gluten pueden elegir una opción de pan sin trigo o sin gluten.

Asimismo, muchas tiendas de comestibles venden pan sin trigo, pan sin gluten y pan blanco enriquecido. Estos productos también están disponibles para comprarlos en línea.

Si tienes más dudas sobre cómo este y otros alimentos pueden beneficiar a tu salud, consulta a un especialista en nutrición.

 

Vía: Medical News Today