A continuación te mencionamos algunos cambios positivos, comunes y útiles, que debes llevar a cabo para superar el difícil período de abstinencia de la nicotina si dejaste de fumar por completo:

  1. Haz una lista de los desencadenantes del tabaquismo. Es más prudente evitar los factores desencadenantes después de dejar de fumar que tentarte demasiado pronto. Si no puede evitarlos desde el principio, ten cuidado cuando estén presentes.
  2. Identifica las áreas y actividades en las que es menos probable que fumes y utilízalas cuando tengas ganas de fumar. Agrega estas alternativas a tu lista de desencadenantes.
  3. Comienza un nuevo pasatiempo, saca un libro de la biblioteca sobre un tema que te interese o toma una clase en el colegio comunitario.
  4. Empieza alguna actividad física nueva. El ejercicio puede ayudarte a dejar de fumar. No pasa mucho tiempo después de que dejas el tabaco para que notes que puedes respirar más fácilmente al caminar, trotar, nadar o montar en bicicleta.
  5. Continúa reuniéndote o hablando semanalmente, y luego mensualmente, con una de tus personas de apoyo.
  6. Recompénsate en aniversarios especiales de la fecha en la que dejaste de fumar, como 1 mes, 3 meses, 6 meses y 1 año. Averigua cuánto dinero has ahorrado al no fumar y gasta esa cantidad, o parte de ella, en algo especial para ti.

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Otros consejos útiles para no fumar incluyen:

  • Maneja el estrés en tu vida. Es imposible evitar por completo el estrés, pero puedes aprender a controlarlo o reducirlo. Esto te ayudará a mantenerte fuerte cuando tengas la tentación de empezar a fumar de nuevo.
  • Aprende a pensar en ti mismo(a) como un(a) no fumador(a). Cambiar tu forma de pensar puede ser difícil, pero las investigaciones han demostrado que la terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ayudar.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health