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La alimentación es una piedra angular para nuestra salud. Sin embargo, es durante la niñez cuando absorbemos la mayor parte de los nutrientes que nos impulsarán en nuestro desarrollo.

Es por ello que esta etapa resulta fundamenta en la formación alimenticia, pues existen evidencias científicas de que los pequeños que adquieren hábitos saludables desde temprana edad los van a llevar a cabo durante el resto de sus vidas.

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Para ayudar a tus hijos a crear estos hábitos, la plataforma ChooseMyPlate.gov, del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), recomienda los siguientes consejos:

1 Muéstrales en qué consiste una comida saludable. Llena la mitad de su plato con frutas y verduras, una cuarta parte con granos (preferiblemente granos integrales) y una cuarta parte con proteína, como carne, mariscos, pescado, habichuelas o tofu.

2 De vez en cuando deja que ellos practiquen cómo elegir buenas opciones, permitiéndoles servirse la comida ellos mismos.

3 Mantén las porciones pequeñas. Una cucharada de frutas y verduras, unos cuantos bocados de carne y una cuarta parte de una rebanada de pan es suficiente para los niños pequeños.

4 No los obligues a comer todo lo que hay en su plato. Si lo hacen y desean más, deja que repitan, pero resístete a ofrecerles más, deja que ellos sean los que te lo pidan.

5 Enséñales a comer lentamente y concentrados, no frente a la televisión o algún dispositivo móvil.

6 Introduce alimentos nuevos más de una vez, preparándolos de distinta forma cada vez. A veces, los niños deben ver un nuevo alimento unas cuantas veces, con frecuencia al lado de uno que conozcan, antes de decidir que les gusta.

7 Permite que te ayuden en la cocina con tareas adecuadas para su edad. Aunque hagan un poco de desorden, aprenderán habilidades de cocina saludables y comer lo que han cocinado los emocionará.

 

Vía: Medline Plus