Parece que la lista de beneficios a la salud de comer mariscos no tiene fin. Gramo por gramo, obtienes más proteínas y menos grasa, así como menos calorías, de la mayoría de los pescados y mariscos.
Además, poseen beneficios para la salud del corazón y también para perder peso.
Pero, ¿cómo puedes incluir más mariscos en tu dieta si nunca has sido un fanático de ellos? Bueno, pues te dejamos algunas ideas fáciles que puedes probar ahora mismo.
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1. Reemplaza la carne por pescado una o dos veces a la semana
En casa, comienza por reemplazar una comida de carne cada semana con un plato de pescado. Las hamburguesas de pescado, los tacos y las brochetas (mariscos servidos en pincho) son recetas fáciles con un sabor familiar. Después de un mes o dos, procura consumir hasta dos comidas de mariscos cada semana.
2. Siempre compra mariscos frescos
Haz amistad con los vendedores o distribuidores de mariscos en tu mercado o supermercado local, a fin de que puedas obtener la comida más fresca. Él o ella también pueden cortar en filete diferentes opciones de pescado, para que puedas prepararlas con mayor facilidad en casa.
3. Pide productos del mar cuando comas en restaurantes
Al salir a comer, adquiere el hábito de pedir productos del mar. Si te preocupan las calorías no deseadas, pide que tu pescado sea al horno o al vapor con cualquier salsa para acompañar. Los platillos del restaurante incluso podrían inspirarte si te has sentido incómodo(a) con cocinar pescado o mariscos tú mismo(a).
4. Comienza con salmón silvestre y camarones
Hay muchas variedades para tratar de mantener tu dieta interesante. Pero los expertos sugieren comenzar con el salmón, preferiblemente silvestre y no de granja, debido a sus ácidos grasos omega-3 saludables para el corazón. Los mariscos como los camarones, las almejas, las ostras y las vieiras son otras opciones sabrosas con minerales importantes. (Las inquietudes sobre su contenido de colesterol se han resuelto en su mayor parte, pero consulta con tu médico si padeces o crees padecer colesterol alto). Asimismo, son fáciles de cocinar al vapor, al igual que hervirlos o saltearlos ligeramente.
Por último recuerda lo siguiente: ya sea que comas dentro o fuera de casa, evita cualquier pescado o marisco empanizado, frito o servido con salsas grasas o cremosas, para que tus opciones se mantengan bajas en calorías. Además, ten cuidado con el tiburón, el pez espada, la caballa y el pez blando, debido a que han sido relacionados con niveles de mercurio que pueden dañar la salud.
Vía: Health Day News
