Existen varios problemas físicos que pueden afectar tus habilidades para conducir un auto, así lo advierte la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard (Estados Unidos).

De acuerdo con la escuela, los siguientes se encuentran entre los más comunes:

1. Artritis

El desgaste de la amortiguación (cartílago) alrededor de los huesos del cuello, los hombros, las manos, las caderas y las rodillas puede provocar dolor, rigidez y dificultad al manejar un vehículo. «El dolor en las manos puede dificultar el agarre del volante. El dolor en las caderas y las rodillas puede dificultar la entrada y salida del automóvil, especialmente si el auto se siente bajo o alto. El dolor de rodilla puede causar molestias al pisar un acelerador. Y el dolor de cuello puede reducir tu capacidad de girar la cabeza cuando retrocedes o cambias de carril», así lo señala el doctor Robert Shmerling, jefe clínico de reumatología en el Centro Médico Beth Israel Deaconess, afiliado a Harvard.

2. Pérdida de la audición

Perder la capacidad de escuchar puede dificultar la detección de peligros, como una ambulancia que se acerca hacia un cruce o intersección«Aunque la mayoría de las personas piensan que la pérdida auditiva involucra a ambos oídos, aquella que afecta a un solo oído también genera riesgos; por ejemplo, hace que sea difícil entender de dónde provienen los sonidos en el espacio. Por lo tanto, aunque una persona pueda escuchar una ambulancia acercándose, quizás le tome más tiempo mirar alrededor y averiguar de dónde viene, lo que podría ser peligroso», subrayó el doctor David Jung, especialista en salud auditiva del Massachusetts Eye and Ear Hospital, afiliado a Harvard.

3. Cataratas

Una catarata es un enturbiamiento del cristalino del ojo, que en condiciones normales debe ser transparente. La condición afecta a la mitad de todas las personas de 75 años o más. «Una catarata afecta tu capacidad para identificar objetivos y distancias, así como para determinar los tiempos de frenado. Las cataratas también afectan la cantidad de contraste que puedes ver, especialmente en la noche, lo que podría significar que no notarás un objeto oscuro en la carretera», advirtió el doctor Roberto Pineda, cirujano de cataratas en el Massachusetts Eye and Ear Hospital.

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4. Neuropatía

La neuropatía es un entumecimiento, hormigueo o ardor que ocurre comúnmente en las extremidades, especialmente en los pies y las pantorrillas. «La neuropatía en los pies puede hacer que conducir sea peligroso si no puede sentir los pedales», puntualizó Ann Hollis, terapeuta ocupacional que realiza evaluaciones clínicas de conducción en el Centro Médico Beth Israel Deaconess, afiliado a Harvard.

Consideraciones importantes

El hecho de que una afección o problema físico pueda afectar tu capacidad para manejar no significa que haya afectado todas tus habilidades. No obstante, es difícil detectar si has cruzado el umbral.

Por ello, la mejor manera de averiguar si tu condición está afectando tus habilidades en la carretera es buscar una evaluación de manejo. Dichos programas se ofrecen a través de hospitales locales, oficinas de control vehicular y de tránsito, y otras agencias.

Los expertos en evaluación de manejo no buscan quitarte las llaves, sino brindarte asesoramiento y apoyo para que mejores tus habilidades de conducción. En algunos casos, esto implica abordar una afección subyacente, como obtener auxiliares auditivos si padeces pérdida auditiva, comenzar un régimen de entrenamiento de fuerza para mejorar la fuerza muscular y reducir el dolor por artritis, o someterse a una cirugía para eliminar las cataratas que están nublando tu visión.

Mejorar tus habilidades también podría requerir modificaciones en el automóvil para compensar tus deficiencias físicas. 

 

Vía: Harvard Medical School