Las bajas temperaturas no tienen por qué ser un impedimento para hacer ejercicio, por el contrario la actividad física durante esta época de frío puede traer muchos beneficios.
La Secretaría de Salud asegura que hacer ejercicio ayuda a mantenerse en forma y a que no se sientan las bajas temperaturas. Además se compensa la subida de peso por el consumo más alto de calorías.
Otro beneficio del ejercicio durante las bajas temperaturas es que mejora el sistema inmunológico, debido a que previene enfermedades comunes de la temporada como gripe e infecciones en las vías respiratorias.
El ejercicio disminuye el estrés y mejora el estado de ánimo y las relaciones con nuestros semejantes.
A nivel metabólico el ejercicio tiene efectos antiaterogénicos, antitrombóticos, antiisquémicos y antiarrítmicos que son benéficos para el organismo; el ejercicio aumenta el colesterol HDL (el tan famoso colesterol bueno). En el caso de las personas que padecen alteraciones en la glucosa, la actividad física ayuda a mantener bajo control la glucosa.
También disminuye el riesgo de muerte por problemas cardiacos y vasculares cerebrales.
La Secretaría de Salud señala que el ejercicio se debe realizar acorde con la edad, género y capacidad física de las personas, por ejemplo en los niños y niñas se recomiendan 60 minutos de ejercicio, en la población adulta joven de 30 a 40 minutos en ambos casos cinco veces a la semana y en el caso de los adultos mayores se recomiendan 20 minutos en un principio para llegar a una hora entre dos o tres veces a la semana.
En esta temporada los especialistas recomiendan practicar ejercicio en lugares cerrados y evitar parques o jardines para prevenir las enfermedades respiratorias tan comunes en el invierno.
También se recomienda para realizar ejercicio hidratarse antes, durante y después de la actividad física, utilizar ropa adecuada (abrigadora), además de realizar calentamiento cinco o diez minutos antes de iniciar el ejercicio.
Vía: Secretaría de Salud
