Aquellas personas que, como decimos en México, ya comienzan a estar «entraditas en años» y que desean mantener un cerebro sano y juvenil, quizás deberían dejar de subir pisos utilizando los elevadores y mejor optar por usar las escaleras. ¿No nos creen? Pues esto fue lo que descubrió un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Concordia en Montreal, Canadá, que observó que «mantenerse en forma» resultó clave para agudizar las mentes de las personas conforme envejecen, al igual que lo hace el pasar más tiempo leyendo o estudiando.
Según Jason Steffener, autor de principal de la investigación, los hallazgos demuestran que «la educación y la actividad física afectan la diferencia entre una predicción fisiológica de la edad y la edad cronológica, y que la gente puede hacer algo de manera ‘activa’ para ayudar a sus cerebros a que se mantengan jóvenes».
«Esto es alentador porque demuestra que una cosa tan simple como subir escaleras tiene un gran potencial como herramienta de intervención para promover la salud cerebral«, añadió el experto.
En el estudio, los investigadores emplearon imágenes por resonancia magnética para evaluar la salud física del cerebro de 331 adultos sanos, con edades entre los 19 y 79 años. Quienes podían subir más tramos de escaleras y tenían niveles de educación más altos poseían cerebros que lucían más «jóvenes«.
En concreto, la edad física cerebral fue casi un año menor por cada año de educación; y por cada tramo de escaleras subido por día, la edad física del cerebro fue poco más de un año y medio más joven.
El trabajo fue publicado recientemente en la revista Neurobiology of Aging.
Aunque el estudio únicamente mostró una asociación entre los factores antes mencionados y la salud cerebral, pues no se diseñó para probar una relación de causa-efecto, Steffener puntualizó que desde hace un tiempo existen diversas campañas que buscan fomentar el uso de las escaleras en entornos de oficinas y en centros de transporte público. Además, dijo que este estudio sugiere que tales campañas también deben ampliarse para los adultos mayores a fin de ayudarles a trabajar en mantener su cerebro joven.
«En comparación con muchas otras formas de actividad física, subir las escaleras es algo que la mayoría de los adultos mayores puede hacer, y de hecho lo hacen, al menos una vez al día, a diferencia de las formas vigorosas de actividad física», concluyó Steffener.
Así que no duden, sin importar la edad que tengan, del efecto antienvejecimiento que el subir escaleras produce en nuestro cerebro, ya que al ser una manera de activarnos físicamente, mantenemos su salud y vitalidad sin importar que pasen los años.
Vía: Health Library
