La adolescencia es un periodo de cambios, tanto físicos como mentales. Durante esta etapa, suelen ocurrir desajustes que llevan al mal humor y, por ende, a problemas de conducta.
De acuerdo con una investigación, este tipo de inconvenientes tienen un vínculo con la somnolencia diurna y el noctambulismo, provocados por los horarios escolares, así como por la cantidad y horario de sueño.
«Horarios escolares que coincidan con las necesidades, la cantidad y el horario de sueño, y la reducción de la somnolencia diurna, son (aspectos) críticos para la salud, la seguridad y el rendimiento de los adolescentes», afirmó Judith Owens, directora de medicina del sueño del Hospital Pediátrico de Boston.
Los resultados de la investigación sugieren que el horario de sueño y la somnolencia diurna podrían contribuir a un mal control de las emociones, y a la disminución de las habilidades de pensamiento.
En este contexto, la Academia Americana de Pediatría de E.U. asegura que el horario ideal para los jóvenes debe ser a partir de las 8:30 hrs., pues los cambios en el ritmo circadiano —reloj interno— complican que logren dormir y descansar antes de las 23:00 hrs.
Consecuencias de un mal sueño
- Mayor riesgo de sobrepeso y obesidad.
- Posibilidad de caer en depresión.
- Aumento de accidentes y lesiones deportivas.
- Ausentismo y bajas calificaciones.
«Lo que tiene mayor impacto no es cuánto tiempo se duerma, sino cuándo se duerme en relación con los ritmos circadianos naturales del cuerpo y cómo afecta la falta de sueño», explicó la especialista.
Durante la investigación se analizó a más de 2,000 estudiantes. El estudio se enfocó en el tiempo de sueño; el estado de ánimo durante el día; si eran noctámbulos o madrugadores; la conducta emocional y las habilidades de pensamiento.
Tener sueño durante el día se relacionó fuertemente con mala conducta y problemas en la capacidad de concentración, así como con complicaciones fisiológicas y en el metabolismo.
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Procura que tus hijos tengan un buen descanso. Si consideras que tienen gran dificultad para dormir, acude con un especialista para conocer opciones que ayuden a disminuir el problema.
Vía: Health Day
