La mayoría de las mujeres presentan cambios en los senos en diferentes momentos a lo largo de sus vidas.
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A continuación te mencionamos dichos cambios:
- Antes o durante los períodos menstruales, los senos pueden sentirse hinchados, sensibles o doloridos. Las mujeres también pueden sentir uno o más bultos durante este tiempo debido al exceso de líquido en sus senos. Es posible que tu médico te pida que regreses para una nueva visita en un momento diferente de tu ciclo menstrual para ver si el bulto ha cambiado.
- Durante el embarazo, los senos pueden sentirse abultados. Por lo general, esto se debe a que las glándulas que producen la leche aumentan en número y se hacen más grandes. Mientras amamantas, puedes desarrollar una afección llamada mastitis, que ocurre cuando un conducto lácteo se bloquea. La mastitis hace que la mama se vea roja y se sienta abultada, caliente y sensible. Puede ser causada por una infección y, generalmente, se trata con antibióticos. En ocasiones, es posible que sea necesario drenar el conducto.
- A medida que se acerca a la menopausia, los niveles hormonales cambian. Esto puede hacer que los senos se sientan sensibles, incluso cuando no estés teniendo tu período menstrual. Tus senos también pueden sentirse más abultados que antes.
- Si estás tomando hormonas (como terapia hormonal para la menopausia), tus senos pueden volverse más densos. Esto puede dificultar la interpretación de una mamografía. Asegúrate de informarle a tu proveedor de atención médica si estás tomando hormonas.
- Después de la menopausia, los niveles hormonales bajan. Puedes dejar de tener bultos, dolor o secreción del pezón que solías tener.
Si tienes más dudas sobre los cambios en los senos en las distintas etapas de la vida, consulta a tu médico.
Fuente: National Cancer Institute
