El debate entre el ejercicio y la medicación para tratar la depresión ha sido un tema recurrente en la comunidad médica y científica. Sin embargo, un estudio reciente arroja luz sobre los impactantes beneficios del ejercicio en la salud mental, especialmente para aquellos que luchan contra la depresión.

De acuerdo con el especialista en prevención cardiovascular Andrew Freeman, es importante prestar atención a las mejoras derivadas por cambios en el estilo de vida. Según él, estas mejoras son altamente rentables y, en muchos casos, superan los beneficios de muchos medicamentos. 

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Para comprobar esto, especialistas realizaron un estudio y encontraron un aumento significativo en los beneficios del ejercicio entre aquellos que padecían depresión, en comparación con aquellos que no tenían antecedentes de esta afección. Además, el estudio demostró que los beneficios del ejercicio continuaban aumentando con más tiempo dedicado a la actividad física, especialmente para aquellos con depresión.

Estos hallazgos se suman a los beneficios psicológicos conocidos del ejercicio, que incluyen la reducción del estrés y la mejora del bienestar emocional. 

Según Karmel Choi, coautor del estudio, el ejercicio puede beneficiar especialmente a las personas que son más susceptibles al estrés y a sus consecuencias para la salud. Esto sugiere que el ejercicio no sólo es una herramienta terapéutica efectiva, sino también una forma de modular el estrés y sus efectos negativos en el cuerpo.

¿Cómo impacta el ejercicio en la salud mental?

El mecanismo detrás de estos beneficios radica en los cambios que el ejercicio produce en el cerebro. Se observó una reducción de las señales de estrés y un aumento de las señales corticales prefrontales, lo que indica un cambio positivo en la función ejecutiva del cerebro.

Estos cambios están asociados con una menor inflamación, menor actividad del sistema nervioso simpático y una reducción de la presión arterial, todos ellos factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares.

Aunque los resultados son prometedores, es importante tener en cuenta que este estudio observacional no puede establecer una relación causal entre el ejercicio y los beneficios observados. Se necesitan más investigaciones, incluidos ensayos aleatorios controlados, para comprender completamente los efectos del ejercicio en la depresión y los mecanismos subyacentes.

Recuerda que incluso 30 minutos diarios de actividad física continua pueden marcar la diferencia. Si tienes depresión, no abandones tu tratamiento médico sin la aprobación de un profesional en salud mental. En su lugar, compleméntalo con actividad física.

 

Fuente: CNN Salud/ Journal of the American College of Cardiology