La enfermedad de Huntington es una afección hereditaria severamente debilitante en la que la muerte selectiva de las células cerebrales da como resultado una pérdida gradual de la función cognitiva (pensamiento), física y emocional. Las complicaciones comunes incluyen problemas para comer y tragar (disfagia), particularmente a medida que avanza la enfermedad. La pérdida de control y coordinación muscular significa que es posible que la persona afectada derrame la comida por la boca y se atragante, así lo explica el Departamento de Salud del Gobierno del Estado de Victoria, en Australia.
La pérdida de peso a menudo se asocia con la enfermedad de Huntington, pero no parece ser un resultado directo de la dieta. Algunos investigadores piensan que la pérdida de peso podría estar relacionada con otros cambios bioquímicos en el cuerpo causados por la enfermedad. Por ello, se recomienda encarecidamente que una persona con Huntington y sus cuidadores busquen asesoría profesional para asegurarse de que su dieta sea nutritiva, con muchas calorías y fácil de comer.
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Una persona con la enfermedad de Huntington tiene más probabilidades de ahogarse. Algunos de los problemas para comer y tragar que pueden experimentar incluyen:
- Enorme aumento del apetito.
- Tratar de comer rápido para satisfacer el hambre urgente.
- Pérdida del control de la motricidad fina en la cara y el cuello que impide masticar y tragar de manera eficiente.
- Incapacidad para cerrar los labios correctamente, llevando a que la comida se derrame fuera de la boca.
- Espasmo irregular del diafragma, que aumenta el riesgo de inhalar en lugar de tragar alimentos.
- Tragar demasiado pronto, que es un peligro de asfixia.
- Miedo a la vergüenza, a asfixiarse o a ensuciar: esto puede empeorar las sacudidas musculares, lo que a su vez hace que comer sea más difícil.
- Otras complicaciones de la enfermedad, como cambios en la capacidad de pensamiento, pueden hacer que la persona elija alimentos inapropiados o intente meter demasiada comida en la boca a la vez.
RECUERDA: Si tienes más dudas sobre la enfermedad de Huntington y los problemas de alimentación que ocasiona, consulta a un profesional de la salud, preferentemente especializado en esta afección.
Fuente: Better Health Channel – Department of Health, State Government of Victoria, Australia
