¿Alguna vez te has sentido mareado(a), aturdido(a) o como si la habitación estuviera dando vueltas a tu alrededor? Si la sensación ocurre con frecuencia, podría ser una señal de que sufres algún problema de equilibrio. Los problemas de equilibrio pueden hacer que te sientas inestable, y también pueden provocar visión borrosa, confusión y desorientación. Son una de las causas de caídas y de lesiones relacionadas con las caídas, como una fractura de cadera.
Algunos problemas de equilibrio se deben a problemas en el oído interno. Otros pueden involucrar otra parte del cuerpo, como el cerebro o el corazón. El envejecimiento, las infecciones, las lesiones en la cabeza, ciertos medicamentos o los problemas con la circulación sanguínea también pueden ocasionar este tipo de dificultades.
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Es importante consultar a tu médico acerca de los problemas de equilibrio. Pueden ser un signo de otros problemas de salud, como una infección de oído o un derrame cerebral. Tu médico puede enviarte a un especialista para un diagnóstico. Es posible que necesites una prueba de audición, análisis de sangre o estudios de imágenes de tu cabeza y tu cerebro. Otras pruebas analizan los movimientos de tus ojos y cómo responde tu cuerpo al movimiento.
En algunos casos, tratar la enfermedad que está ocasionando el trastorno ayudará con el problema de equilibrio. Hacer ejercicio, un cambio en la dieta y algunos medicamentos también pueden ayudar.
