La pancreatitis autoinmune (PAI) es una inflamación crónica que puede ser causada por un ataque del sistema inmunológico del cuerpo al páncreas y que responde a la terapia con esteroides. Hoy en día se reconocen dos subtipos de PAI, el tipo 1 y el tipo 2, así lo indica la Clínica Mayo, en Estados Unidos.

La PAI tipo 1 es la manifestación pancreática de una enfermedad llamada enfermedad relacionada con IgG4 (IgG4-RD), que suele afectar a múltiples órganos, incluyendo el páncreas, los conductos biliares del hígado, las glándulas salivales, los riñones y los ganglios linfáticos.

La PAI tipo 2 parece afectar solo al páncreas, aunque cerca de un tercio de las personas con la afección tienen enfermedad inflamatoria intestinal asociada.

Cabe señalar que la PAI tipo 1 puede diagnosticarse de forma equivocada como cáncer de páncreas. Las dos condiciones presentan signos y síntomas que pueden presentarse al mismo tiempo, pero requieren tratamientos muy distintos, por lo que es crucial distinguir una de la otra.

Asimismo, la pancreatitis autoinmune es difícil de diagnosticar. Generalmente, no ocasiona ningún síntoma, pero los de la PAI tipo 1 son muy parecidos a los del cáncer de páncreas.

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Los signos y síntomas de dicho cáncer pueden incluir:

  • Orina oscura
  • Heces pálidas o heces que flotan en el inodoro
  • Piel y ojos amarillos (ictericia)
  • Dolor en la parte superior del abdomen o en la parte media de la espalda
  • Náuseas y vómitos
  • Debilidad o cansancio extremo
  • Pérdida de apetito o sensación de saciedad
  • Pérdida de peso sin razón aparente o conocida

El signo más común de la PAI tipo 1 (la cual se presenta en alrededor del 80% de las personas), es la ictericia indolora, causada por la obstrucción de los conductos biliares. La PAI tipo 2 puede presentarse con episodios recurrentes de pancreatitis aguda. El dolor en la parte superior del abdomen, un síntoma común del cáncer de páncreas, usualmente no se presenta en la pancreatitis autoinmune.

Normalmente, la PAI no ocasiona ningún síntoma. No obstante, debes consultar a tu médico si experimentas pérdida de peso inexplicable, dolor abdominal, ictericia u otros signos y síntomas que te causen molestias.

 

Fuente: Mayo Clinic