Las inyecciones epidurales de esteroides (IEE) son un método común para tratar la inflamación asociada con el dolor de piernas relacionado con la espalda baja o el dolor de brazos relacionado con el cuello. En ambas condiciones, los nervios espinales se inflaman debido a que los pasajes por donde viajan los nervios se hacen más estrechos a medida que descienden o salen de la columna vertebral.
El estrechamiento de los pasajes de la columna puede ocurrir por diversas causas, que incluyen hernias de disco, espolones óseos, engrosamiento de los ligamentos en la columna, quistes en las articulaciones o incluso alineación anormal de las vértebras («vértebras deslizadas», también conocidas como espondilolistesis).
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El espacio epidural es una «manga» llena de grasa que rodea el saco espinal y brinda amortiguación para los nervios y la médula espinal. Los esteroides («cortisona») colocados en el espacio epidural poseen una acción antiinflamatoria muy potente que puede disminuir el dolor y permitir que el funcionamiento de los pacientes mejore notablemente. Aunque los esteroides no cambian o curan la afección subyacente, sí pueden romper el ciclo de dolor e inflamación, otorgándole alivio al cuerpo. De esta forma, las inyecciones pueden brindar beneficios que duran más que los efectos del propio esteroide.
Fuente: Knowyourback.org
