Las mamás y papás de adolescentes que están aprendiendo a manejar un auto pueden desempeñar un papel crucial en hacer que sus hijas e hijos se conviertan en conductores seguros, así lo señala la Asociación de Gobernadores para la Seguridad en las Carreteras.

En Estados Unidos, millones de adolescentes están aprendiendo a manejar en un momento especialmente desafiante, ya que la conducción peligrosa y arriesgada ha aumentado durante la pandemia de COVID-19, indicó la asociación.

«Los conductores adolescentes son más propensos que cualquier otro grupo de edad a verse involucrados en un accidente fatal debido a su falta de experiencia y de madurez», comentó Pam Shadel Fischer, ejecutiva senior de la asociación.

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«Los padres han pasado los últimos 19 meses enfocados en la salud y seguridad de sus hijos durante la pandemia. Esa atención a la seguridad puede extenderse fácilmente a la conducción, y la mejor manera de hacerlo es que los padres y los adolescentes trabajen juntos para garantizar que los conductores jóvenes desarrollen el habilidades necesarias para mantenerse seguros a sí mismos y a todos los demás en la carretera», apuntó Fischer.

Los expertos en seguridad describieron tres maneras principales en las que los padres pueden hacer que sus adolescentes sean mejores conductores:

  1. Conoce y haz cumplir las leyes de licencias de conducir de tu lugar de residencia. Estas leyes introducen gradualmente los privilegios de conducir a medida que los adolescentes adquieren más experiencia. Las investigaciones demuestran que estas leyes reducen las muertes por accidentes de tránsito que involucran a conductores adolescentes.
  2. Programa sesiones regulares de práctica de manejo con tu hija o hijo adolescentes. Y sigue así, incluso después de que tengan la licencia para conducir sin supervisión. Los adolescentes cuyos padres vigilan activamente su conducción tienen menos probabilidades de sufrir un accidente y de participar en conductas de riesgo como exceso de velocidad, conducir con problemas o distraídos, y no abrocharse el cinturón.
  3. Trabaja con tu hijo(a) adolescente para imprimir las reglas de tránsito de la familia. Crea y haz cumplir un acuerdo de conducción entre padres e hijos adolescentes que establezca claramente las reglas y las consecuencias de violarlas. Colócalo donde todos lo vean, como en el refrigerador o junto a las llaves del auto, pues ayudará a reforzar su importancia.

 

Fuente: Health Day News