La osteomielitis es una infección en un hueso. Las infecciones pueden llegar a los huesos viajando a través del torrente sanguíneo o diseminándose desde el tejido cercano. Asimismo, las infecciones pueden comenzar en el hueso mismo si una lesión lo expone a ciertos gérmenes.

Los fumadores y las personas con problemas de salud crónicos, como diabetes o insuficiencia renal, poseen más riesgo de desarrollar osteomielitis. Quienes padecen diabetes pueden desarrollar osteomielitis en los pies si tienen úlceras en tales extremidades.

Aunque alguna vez se consideró incurable, la osteomielitis ahora se puede tratar con éxito. La mayoría de las personas requieren cirugía para extirpar áreas del hueso que han muerto. Después del procedimiento, normalmente se utilizan fuertes antibióticos intravenosos como tratamiento.

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La mayoría de los casos de osteomielitis son ocasionados por la bacteria estafilococo, un tipo de germen que suele habitar en la piel o en la nariz incluso de personas sanas.

Los gérmenes pueden ingresar a un hueso de varias maneras, pero las siguientes son las principales causas:

  1. El torrente sanguíneo. Los gérmenes en otras partes de tu cuerpo, por ejemplo, en los pulmones debido a una neumonía o en la vejiga debido a una infección del tracto urinario, pueden viajar a través del torrente sanguíneo hasta un punto debilitado en un hueso.
  2. Lesiones. Las heridas punzantes graves pueden llevar gérmenes al interior de tu cuerpo. Si una lesión de este tipo se infecta, los gérmenes pueden propagarse hacia un hueso cercano. Los gérmenes también pueden ingresar al cuerpo si se fractura un hueso tan gravemente que parte del mismo sobresale a través de la piel.
  3. Cirugía. La contaminación directa con gérmenes puede ocurrir durante las cirugías para reemplazar articulaciones o reparar fracturas.

 

Fuente: Mayo Clinic