Aunque hay una serie de ejercicios o técnicas de respiración que puedes intentar para relajarte y quedarte dormido(a), algunos principios básicos se aplican a todos ellos.

Siempre es una buena idea cerrar los ojos, lo que puede ayudarte a eliminar las distracciones. Concéntrate en tu respiración y piensa en el poder curativo de la misma.

Cada uno de estos dos ejercicios tiene beneficios ligeramente distintos. Pruébalos y ve cuál es mejor para ti, pues pronto estarás durmiendo como un bebé.

1. Técnica de respiración 4-7-8

  • Permite que tus labios se separen suavemente.
  • Exhala por completo, haciendo un silbido entrecortado mientras lo haces.
  • Presiona los labios mientras inhalas silenciosamente por la nariz durante 4 segundos.
  • Aguanta la respiración mientras cuentas hasta 7.
  • Exhala de nuevo durante 8 segundos completos, haciendo un sonido de silbido en todo momento.
  • Repite 4 veces cuando empieces por primera vez. Eventualmente trabaja hasta 8 repeticiones.

El Dr. Andrew Weil desarrolló esta técnica como una variación de pranayama, una antigua técnica yóguica que ayuda a las personas a relajarse mientras reponen el oxígeno en el cuerpo.

Conoce más: ¿Por qué es importante la respiración en el yoga?

2. Ejercicio alternativo de respiración nasal

Estos son los pasos para el ejercicio de respiración nasal o de fosa nasal alterna, también llamado nadi shodhana pranayama:

  • Siéntate con las piernas cruzadas.
  • Coloca tu mano izquierda sobre tu rodilla y tu pulgar derecho contra tu nariz.
  • Exhala completamente y luego cierra la fosa nasal derecha.
  • Inhala por la fosa nasal izquierda.
  • Abre la fosa nasal derecha y exhala por ella, mientras cierras la izquierda.
  • Continúa esta rotación durante 5 minutos, terminando al realizar una exhalación por la fosa nasal izquierda.

Un estudio de 2013 encontró que las personas que probaron ejercicios de respiración nasal se sintieron menos estresadas ​​después, mejorando así su calidad de sueño.

 

Fuente: Healthline