Una nueva investigación publicada recientemente en la revista Journal of Clinical Sleep Medicine muestra que los ronquidos no son solo del dominio de los hombres.
«Encontramos que aunque no se encontraron diferencias en la intensidad de los ronquidos entre los géneros, las mujeres tienden a ignorar el hecho de que roncan y subestiman el volumen de sus ronquidos», dijo el doctor Nimrod Maimon, autor principal y jefe de medicina interna en el Centro Médico de la Universidad Soroka, en Be’er Sheva, Israel.
«Las mujeres reportaron haber roncado con menos frecuencia y lo describieron como más leve», dijo Maimon en un comunicado de prensa de la Academia Americana de Medicina del Sueño.
El estudio incluyó a más de 1,900 personas, con una edad promedio de 49 años, que fueron derivadas a un centro de trastornos del sueño.
El ronquido se encontró en el 88% de las mujeres, pero solo el 72% informó que roncaba. Ambas tasas fueron aproximadamente del 93% entre los hombres en el grupo de estudio.
Entre las personas que roncaron, la intensidad máxima promedio fue de 50 decibeles entre las mujeres y 51.7 decibeles entre los hombres. Mientras que el 49% de las mujeres tenían ronquidos graves o muy graves, solo el 40% calificaron sus ronquidos dentro de este nivel, hallaron los investigadores.
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Los autores del estudio señalaron que existe un estigma social asociado con los ronquidos entre las mujeres, por lo que ellas podrían no ser sinceras cuando se les pregunta sobre los ronquidos. Más preocupante, esto podría contribuir a un diagnóstico insuficiente de apnea obstructiva del sueño en las mujeres.
Los ronquidos son una señal de advertencia común para la apnea obstructiva del sueño, en la cual la vía aérea superior se colapsa repetidamente durante el sueño. Si no se trata, la apnea del sueño puede causar presión arterial alta, accidente cerebrovascular, enfermedad cardíaca y otros problemas de salud.
«El hecho de que las mujeres informaran sobre los ronquidos con menos frecuencia y los describieran como más leves podría ser una de las barreras que impiden que las mujeres lleguen a las clínicas de sueño para un estudio del sueño», lamentó Maimon.
Al evaluar a las mujeres para detectar la apnea obstructiva del sueño, los profesionales de la salud deberían considerar otros factores además de los ronquidos autoinformados, sugirió.
Por ejemplo, las mujeres con apnea del sueño pueden ser más propensas que los hombres a reportar otros síntomas, como fatiga diurna o cansancio.
Seas hombre o mujer, habla con tu médico si roncas con frecuencia, y no dejes que los estigmas sociales te impidan cuidar tu salud.
Vía: Health Day News
