La caminata por sí sola es una de las actividades físicas más recomendadas para las personas de todas las edades, ya que se trata de un ejercicio que no es tan complicado de llevar a cabo y aporta un gran número de beneficios para la salud integral.

Sin embargo, recientemente se ha popularizado un tipo de caminata que, si bien puede llegar a ser un tanto peculiar para algunas personas, aporta beneficios aún mayores que un paseo común.

Se trata de la denominada caminata nórdica -también conocida como marcha nórdica- y básicamente consiste en caminar con la ayuda de un par de bastones similares a los que se ocupan para esquiar.

Ejercicio peculiar

Aunque es una actividad que recientemente se puso de moda, lo cierto es que no se trata de una actividad reciente. La marcha nórdica es un tipo de ejercicio que se originó en Finlandia durante la década de 1930, como un tipo de entrenamiento de verano para los esquiadores de fondo profesionales.

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La caminata nórdica se basa en el uso de unos bastones especiales para caminar, parecidos a los del esquí, mismos que, además de trabajar los músculos de la parte superior del cuerpo, sirven de propulsión para avanzar.

Es precisamente debido al uso de estos bastones que la marcha nórdica es sumamente beneficiosa para la salud de chicos y grandes. Hecho por el que esta actividad cada vez es más recomendada por expertos en salud.

Beneficios

Entre los principales beneficios a la salud integral que se asocian a la práctica frecuente de la marcha nórdica se encuentran:

1. Puede llegar consumir un 40% más de la energía que requiere una caminata convencional, ya que este tipo de ejercicio está reconocido como una actividad física que involucra a todo el cuerpo.

2. Es una actividad ideal y ampliamente recomendable para las personas mayores, ya que es suave para las articulaciones y adecuada para todos los niveles de estado físico, además de que se practica al aire libre, lo que ofrece un beneficio extra.

3. Ayuda a fortalecer los músculos, los huesos y mejorar el equilibrio.

4. Puede ayudar a disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como cardiopatías, diabetes tipo 2, asma y algunos tipos de cáncer.

5. Puede utilizarse como parte de un programa para perder peso.

 

Vía: BBC