Comer de más nos conduce a muchos riesgos. El más próximo es el sobrepeso o la obesidad, pero a partir de ahí pueden venir como avalancha una serie de problemas para nuestra salud integral. Una buena forma de evitarlo puede depender de nuestra percepción de saciedad.

Se entiende como saciedad al sentimiento de quedar satisfechos después de una comida, es decir, aceptar que hemos comido lo suficiente y que no tendremos hambre por un buen rato.

Pues es precisamente el grado de saciedad que una persona tenga con respecto a una comida lo que puede afectar la cantidad de comida que se ingiere posteriormente, según encontró un reciente estudio británico.

De acuerdo con la investigación, cuyos hallazgos fueron presentados en una reunión de la Sociedad Británica de Psicología, las personas que sienten un mayor grado de saciedad tras su primera comida del día, tienden a comer menos calorías durante el resto de la jornada.

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En cambio, cuando las personas comieron un desayuno que no los dejó con un pleno sentimiento de saciedad, dijeron que tenían más hambre después de unas pocas horas, por lo que comieron de más en el almuerzo y consumieron significativamente más calorías a lo largo del día que cuando quedaron completamente satisfechos con su desayuno.

Las expectativas de una persona pueden tener un impacto en sus sensaciones posteriores de hambre y saciedad, y hasta cierto grado, en su consumo posterior de calorías”, apuntó Steven Brown, líder del estudio e investigador de la Universidad de Hallam en Sheffield, Reino Unido.

El especialista añadió que los investigadores también midieron la comida que las personas consumieron durante el resto del día, y encontraron que la ingesta total era más baja cuando las personas comieron un desayuno que los dejó más satisfechos.

Algunas opciones de desayunos saludables y que te dejarán más satisfecho son:

-Avena.- Contiene hidratos de carbono complejos acompañados de una buena cantidad de fibra y también grasas insaturadas, lo que la convierte en un cereal muy saciante. Se puede consumir junto con otro alimento que la hidrate, como agua, leche o yogur.

-Huevo.- Es una de las mejores fuentes de proteínas que podemos incorporar a nuestra alimentación. Una de las formas más saludables de comerlo es cocerlo y colocarlo en rodajas sobre una tostada integral previamente untada con aguacate.

-Frutas.- Especialmente las manzanas, peras y los frutos rojos. Estas nos aportan una buena cantidad de fibra y agua, que también colaboran a la hora de mantenernos satisfechos.

 

Vía: Hola Doctor