Imagina a un niño de seis años con síntomas de resfriado y mareos. Tal vez no parezca algo grave, pero podría ser indicio de una enfermedad incapacitante.
De forma similar a la poliomielitis, la mielitis flácida aguda (AFM) afecta el sistema nervioso del cuerpo. Desafortunadamente, es una enfermedad que puede causar parálisis de por vida, aunado a que no puede prevenirse con una vacuna.
Síntomas
- Debilidad repentina.
- Pérdida de movimiento en una o más extremidades.
- Reflejos disminuidos o ausentes.
- Dolor o adormecimiento.
La AFM afecta el sistema nervioso, específicamente la médula espinal. La causa más común responde a las infecciones virales, pero también se presenta por toxinas en el ambiente, desórdenes genéticos y Síndrome Guillain-Barre —respuesta inmune anormal a ataques de los nervios del cuerpo—.
En algunos casos, la debilidad facial puede acompañar a la debilidad muscular, a través de la disfunción de los nervios que controlan la cabeza y el cuello, de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Los músculos que suelen presentar más daños son: deltoides, trapecio, cuádriceps, glúteos, intercostales y tibial.
A decir de la Secretaría de Salud, no existe un tratamiento específico para este tipo de parálisis, pues surge a consecuencia de otras enfermedades.
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Recomendaciones
Independientemente de éste o cualquier otro padecimiento, es importante que lleves a tus hijos con un médico para realizarle revisiones cada cierto tiempo. Procura que estén al día con todas las vacunas. También:
- Vigila que laven sus manos periódicamente.
- Evita que estén en contacto con personas afectadas por la enfermedad.
- Desinfecta las superficies que se tocan con frecuencia.
Vía: Hola Doctor/ BBC Salud