A menudo se recomienda reducir o eliminar el consumo de grasas, principalmente cuando se busca perder peso. Lo cierto es que las grasas son un macronutriente, es decir, el cuerpo necesita de ellas para funcionar correctamente.

Especialistas en el tema aseguran que no es necesario dejarlas de lado, sino saber elegir los alimentos que benefician la salud del corazón, es decir, aquellos que contienen grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas.

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¿Qué pasaría si dejamos de comer grasas por completo? De acuerdo con un estudio dirigido por investigadores canadienses, y publicado en la revista The Lancet, las personas que abandonan o reducen el consumo de productos altos en grasas, aumentan su ingesta de carbohidratos —situación que resulta contraproducente para la salud—.

A decir de los científicos de la Universidad McMaster de Ontario, las personas que consumen grandes cantidades de carbohidratos tienen un mayor riesgo de mortalidad.

“Contra lo que se cree, un incremento del consumo de grasas (buenas) está asociado con un menor riesgo de mortalidad —en comparación con la ingesta de carbohidratos—, es por eso que las directrices nutricionales en todo el mundo necesitan cambiar», mencionaron.

Cabe destacar que la investigación se centró en las enfermedades cardiovasculares y la mortalidad, y no en los efectos de las grasas y los carbohidratos en la obesidad.

Recuerda, dentro de la pirámide alimenticia existen tanto carbohidratos saludables, como grasas benéficas para el cuerpo.

No es necesario eliminar ningún macronutriente de tu dieta, sino elegir aquellos que aporten lo que tu cuerpo realmente necesita. Si tienes dudas al respecto, visita a un especialista en nutrición.

 

Vía: Mayo Clinic