Existen dos subgrupos de cereales: los cereales integrales y los cereales refinados.

Los cereales integrales incluyen las tres partes del grano, que son el salvado, el germen y el endospermo. El cuerpo descompone los granos integrales de estos cereales lentamente, por lo que tienen un menor efecto sobre el nivel de azúcar en sangre de una persona.

Asimismo, los cereales integrales tienden a contener más fibra y proteína que los cereales refinados.

Los granos refinados son granos de cereal procesados que no contienen los tres componentes originales. Los granos refinados también tienden a tener menos proteína y fibra, y pueden ocasionar picos de azúcar en sangre.

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Los cereales solían formar la base de la pirámide alimenticia aprobada por diversos gobiernos, lo que significaba que la mayor parte de la ingesta calórica diaria de una persona provenía de los granos de cereal. Sin embargo, las normas actualizadas sugieren que los granos deben constituir solo una cuarta parte del plato de una persona.

Al menos la mitad de los cereales que una persona come a diario deben ser cereales integrales. Los granos integrales saludables incluyen los siguientes:

  • Quinua
  • Avena
  • Arroz integral
  • Cebada
  • Alforfón

 

Fuente: Medical News Today