Los cereales integrales contienen significativamente más fibra que los cereales procesados. También son buenas fuentes de vitamina E y vitaminas B, incluido el ácido fólico, así como de otros nutrientes importantes.

Uno de los desayunos más rápidos y saludables que puedes preparar para tu hijo(a) es cereal integral con leche descremada; lee las etiquetas para encontrar una marca que aporte al menos 5 gramos de fibra por porción y no esté cargada de azúcar. Para obtener todavía más fibra, vitaminas y minerales, cúbrelo con pasas o fresas en rodajas.

Conoce más: Dieta sin gluten, ¿recomendable para los niños?

Cuando compres pan integral, no confíes en la apariencia: puedes pensar que cuanto más marrón se ve el pan, más granos enteros contiene. Pero algunos panes marrones simplemente tienen colorante alimentario agregado. Además, un sello que dice «pan de trigo» no significa trigo integral e incluso una hogaza etiquetada como «trigo integral» puede mezclarse con más harina refinada de la que deseas.

Con base en lo anterior, es aconsejable leer la letra pequeña y ver si los ingredientes principales de la lista incluyen harina de trigo integral, harina de centeno oscuro, copos de avena, salvado de avena o germen de trigo. Solo una rebanada de pan integral de una tienda naturista puede contener hasta 4 gramos de fibra.

Sírvelo tostado con mantequilla de cacahuate o con rodajas de aguacate. O úsalo para preparar sándwiches.

 

Fuente: Health Day