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menos-calorias-vida-mas-sana.2¿Quieres disfrutar de una vejez más sana? Intenta consumir menos calorías cada día, o al menos es lo que sugiere un nuevo estudio dirigido por investigadores del Instituto Nacional Sobre el Envejecimiento (NIA) de Estados Unidos.

Los «resultados son interesantes«, declaró en comunicado de prensa el doctor Evan Hadley, coautor del estudio y director de geriatría y gerontología clínica del NIA. «Muestran que este grado de restricción calórica sostenida puede influir sobre los factores de riesgo de la enfermedad y los posibles predictores de la longevidad en personas sanas no obesas«.

La investigación incluyó a más de 200 adultos sanos (jóvenes o de mediana edad) que tenían peso normal o un ligero sobrepeso. Fueron asignados al azar a un grupo de restricción calórica o a un grupo control que continuó con sus hábitos de alimentación regulares.

Estudios previos con modelos animales muestran que la restricción calórica (ingerir menos calorías al mismo tiempo que se consumen nutrientes esenciales) alarga la longevidad y ralentiza el avance de muchas enfermedades relacionadas con la edad.

Los participantes del grupo de restricción calórica debían perder el 15.5 por ciento del peso durante el primer año, apuntaron los investigadores. Para lograrlo, los voluntarios del estudio debían reducir su ingesta calórica en un 25 por ciento. Ante ello, se les pidió que mantuvieran su peso estable durante el segundo año del estudio.

Las personas de dicho grupo perdieron en promedio el 10 por ciento de su peso corporal en el primer año, y mantuvieron tal pérdida de peso en el segundo año. A pesar de que el grupo no logró la pérdida de peso estipulada, los científicos afirmaron que esta pérdida de peso sostenida ha sido la más grande hasta ahora observada en un ensayo sobre la dieta con personas que no padecen obesidad.

La disminución promedio del 12 por ciento en la ingesta calórica se alejó bastante del objetivo del 25 por ciento, pero los participantes mantuvieron la restricción calórica durante los dos años completos del estudio.

Las personas en el grupo de restricción no mostraron cambios en su metabolismo que fueron observados en los estudios anteriores con animales. Pero sí mejoraron significativamente en varios factores de predicción de la enfermedad cardiaca, como una reducción del 6 por ciento en el colesterol total, una reducción del 4 por ciento en la presión arterial, y un aumento en el nivel de colesterol HDL «bueno».

Asimismo, la restricción calórica redujo en 47 por ciento los niveles de la proteína reactiva C, un marcador de inflamación vinculado con la enfermedad cardiaca; y también se redujo la resistencia a insulina, factor de riesgo de la diabetes.

Sin embargo, algunas personas del grupo de restricción calórica desarrollaron una anemia temporal. El estudio mostró que algunos presentaron reducciones mayores de lo anticipado en la densidad ósea. Los resultados resaltan la importancia de llevar un seguimiento médico durante la restricción calórica, declararon los investigadores.

Hadley enfatizó que es importante ver si la reducción calórica ofrecería beneficios adicionales a largo plazo. Agregó que sería útil averiguar si la pérdida de peso por consumir menos calorías ofrece más beneficios que la pérdida de peso inducida por el ejercicio.

El estudio fue publicado en la revista Journal of Gerontology: Medical Sciences.

 

Vía: National Library of Medicine