Actualmente, la Ciudad de México y muchos otros estados del país poseen un nivel de transmisión de COVID-19 en toda la comunidad.

Por lo general, las personas que desarrollan el COVID-19 experimentan una enfermedad leve y se pueden recuperar en casa. En el caso específico de los residentes de edificios o condominios, estos no están obligados a informar a la administración ni a los vecinos si están enfermos o dieron positivo al COVID-19. Las medidas más efectivas que pueden tomar los propietarios, residentes y administradores de edificios para reducir las posibles exposiciones, así como el riesgo de transmisión del COVID-19 entre los residentes y el personal, son:

-Limpieza ambiental de rutina

Esta incluye el aseo y desinfección de áreas comunes, como los vestíbulos, elevadores, cuartos de lavado y de servicios, así como de cubos de escaleras.

También deben limpiarse y desinfectarse a diario las superficies que se tocan con frecuencia, como las manijas de las puertas, los barandales de las escaleras, los botones de los elevadores, los mostradores de la recepción, las placas de protección de cerraduras y el equipo del cuarto de lavado.

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-Implementar medidas de distanciamiento social

La distancia física entre residentes y empleados del edifico debe de ser de aproximadamente 2 metros. El personal del edificio y los ocupantes deben mantener el distanciamiento social cuando reciban paquetes o correo, y cuando entren o salgan del edificio.

Otras medidas incluyen:

  • Los paquetes a domicilio deben entregarse en la puerta de entrada del edificio, o los residentes deben pedir a los repartidores que les envíen un mensaje de texto o les llamen y dejen los paquetes en la puerta, a fin de minimizar el contacto físico y evitar tocar superficies.
  • Posponer el mantenimiento no urgente o la presencia de otras personas.
  • Cerrar o limitar el acceso a áreas comunes como gimnasios, salones de fiesta, estancias y albercas, ya que estas son áreas donde puede ser difícil mantener el distanciamiento social.
  • Limitar el uso de espacios comunes, como las áreas para las necesidades de las mascotas, salas de computación y cuartos de almacenamiento.
  • Si hay cuartos de lavado compartidos, la administración del edificio debe considerar la publicación de señales y limitar el número de personas que usen el cuarto de lavado al mismo tiempo, para garantizar el distanciamiento social.

 

Vía: San Francisco Department of Public Health