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adulto-mayor-iCuando se habla de medicamentos, la meta es que todas las personas puedan acceder a sus beneficios, pero, al mismo tiempo, que se respeten como un tema serio; por ello, para aprovecharlos al máximo, se deben tomar con mucho cuidado y según las indicaciones. Así lo señala la doctora Sandra Kweder subdirectora de la Oficina de Medicamentos Nuevos de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos.

«Como sociedad, nos hemos hecho dependientes de los farmacéuticos para ayudarnos a alcanzar una vida más larga y de mejor calidad. Es un maravilloso éxito de la medicina occidental», precisó en un comunicado de prensa.

No obstante, para las personas mayores este es un asunto de particular importancia.

Conforme se envejece, mucha gente tiene necesidad de tomar diferentes medicinas, una situación que puede aumentar el riesgo de interacciones farmacológicas potencialmente peligrosas; asimismo, en ocasiones, podría resultar complicado llevar su control o tomarlos exactamente como lo indica la receta.

En todo caso, hay algunas sugerencias que permiten que los adultos mayores prevengan situaciones potencialmente nocivas cuando ingieren medicamentos.

En primera instancia, siempre se deben seguir las indicaciones del médico y no dejar de tomar los fármacos –aunque se sienta mejor– sin hablar primero con el especialista. Asimismo, es importante contactarlo inmediatamente si se tienen efectos secundarios no deseados.

Es importante tomar la dosis correcta. No se deben saltar ni tomar el doble cuando se ha olvidado una, pues como anota Kweder, “los medicamentos no pueden funcionar a menos que se los tome».

«Por ejemplo, los medicamentos que tratan afecciones crónicas como la hipertensión y la diabetes por lo general solo funcionan cuando se toman de forma regular y según las indicaciones. Tiene que tomarlos continuamente para mantener el control de su afección».

Una buena idea es tener una lista con todos los medicamentos que se necesiten para mantener un control. En ella debe estar también las dosis, la frecuencia y en qué momento se deben tomar. Darle una copia de esa lista a un amigo o un familiar podría ser útil en caso de una emergencia.

Es importante leer toda la información que viene con el medicamento y recordar hablar con su médico sobre cualquier indicación especial. Si se toma más de un fármaco, es esencial que se informe al especialista. Esto es particularmente importante pues al combinarse podrían interactuar, es decir, que uno interfiera en el funcionamiento del otro. Considere que ciertos alimentos y el alcohol también pueden afectar el medicamento.

Al menos una vez al año es necesario revisar las medicinas con el doctor y confirmar si aún se deben tomar. En esta consulta también es posible preguntar si existen nuevos fármacos que sean más efectivos o baratos.

Vía: HealthDay News